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Primer fin de semana de mayo
Uno de mis paseos favoritos por Londres, es seguir el canal de lo que llaman la Pequeña Venecia. Cuando me enteré que el primer fin de semana de mayo había festival, no dudé en ir allí.
No decepcionó. Bajamos en la parada de metro de Paddington. Salimos directamente al canal y ya pudimos apreciar el gentío yendo y viniendo. Dirigiéndonos al ensanchamiento que es el que, propiamente, se llama Little Venice, entre las calles Warwick Crescent y Bloomfield Road, vimos muchos puestos, la mayoría artesanales, tanto de ropa como bisutería y algunos puestos con talleres diversos para niños. Todo esto en la orilla ¿sur? ¿oeste? no lo se muy bien.
La de en frente, quedaba reservada a puestos de comida y bebida y, probablemente, ahí es donde se montan los pequeños conciertos que sólo pudimos ver uno, un tanto estrambótico.
Los puestos, pues un poco lo de siempre que encuentras en esta ciudad en diversos sitios (en todos los eventos y mercadillos que surgen), como siempre, caros -eterno problema de Londres- pero te entretienes mirando unos y otros. Pero los protagonistas de este día, son los barcos. Al llegar al ensanchamiento, es impresionante el número de barcos que hay. Hubiera merecido la pena ver las múltiples maniobras que tuvieron que hacer para colocar los barcos en batería. Imposible contar el número de ellos. Muy diferente la imagen de la zona, cualquier día, que salvo por los tres o cuatro fijos que siempre están, (la mayoría restaurantes) a veces se ven ir de un lado a otro, uno o dos barcos más.
El ambiente era claramente festivo. Los barcos adornados más que habitualmente y algunos de sus propietarios, vestidos de formas curiosas. Vimos a una pareja con ropas medievales. En otros barcos, se organizaban mini fiestas privadas. La mayoría tenían las puertas abiertas para que los curiosos pudiéramos verlos por dentro. Las miles de banderillas de prácticamente todos, y el cielo azul que nos regaló Londres ese día, hizo que fuera una visión preciosa de vivos colores haciendo que los espantosos scalextrics que sobrevuelan miles de barrios londinenses, pasaran desapercibidos en este día